La inflamación de la laringe y de las cuerdas vocales puede ser manifestada bajo la forma de laringitis aguda o laringitis  crónica. Existen, sin embargo, una multitud de factores predisponentes estrechamente relacionados con el desarrollo de una laringitis entre las cuales destacan principalmente las  infecciosas (viral, bacteriana o micótica),las de origen alérgico, laringitis inducida por tos, las de uso excesivo de la voz, la secundaria a  inhalación de sustancias irritantes (p. ej., humo de cigarrillo o ciertos fármacos en aerosol), tabaquismo, alcohol, reflujo gastroesofágico, factores del entorno (polución, vapores irritantes, variaciones bruscas de temperatura, etc.).

La laringitis incluye a un conjunto de signos y síntomas laríngeos no específicos que también pueden ser causados por otras enfermedades. En consecuencia el diagnóstico puede ser confuso y requiere correlación con la historia clínica, el examen físico y, si es necesario, con la evaluación especializada, incluyendo la visualización de la laringe y exámenes complementarios.

El tratamiento se enfoca principalmente en la etiología del cuadro clínico y su cronicidad.